miércoles, 19 de agosto de 2015

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ᅝᅝ ᅝ☼ Envidia; el peor enemigo. ¿Cómo decirle "no"?

La envidia es una forma falsa de admiración, así de fácil. Sentirse admirado puede aumentar nuestro ego, obviamente, pero a la larga puede hacernos mal. Siempre existirán las personas que no están de acuerdo con tu felicidad, con tu estilo de vida, contigo mismo... Muchas veces te preguntarás por qué "son así" o, tal vez, te preguntarás: "¿Yo soy una persona envidiosa?". 
¡Tranquilo/a! Estas preguntas son normales en nosotros mismos, es más, sabiendo cómo verlas, podemos "lidiar" con ellas. En nuestras emociones hay un gran por ciento de envidia en nuestras vidas, tanto como personales como no.

Cómo evitar a las personas envidiosas:  

  • Las personas envidiosas más que nada presentan celos (aunque no son lo mismo los celos y la envidia), egocentrismo, baja autoestima, egoísmo, rencor, etc. La envidia puede invadirnos, y si no sabemos cómo tratarla, a veces puede llegar hasta a ahogarnos. La envidia es como una enfermedad latente o ardiente que invade el cuerpo humano, tan así que a veces nos hace preguntarnos cosas tan grandes y graves que no logramos entender. "¿Por qué el vecino tiene un auto nuevo y yo no?". Puede parecer algo pasajero a veces, es más, eso es lo que se ve al principio en todos los casos, pero, obviamente, puede dañarnos tanto física como mentalmente. 
  • Las principales caracterísiticas de un envidioso es decirte que no puedes hacer tal cosa o que no es para ti tal otra, ¡trata de evitar eso! Más que nada porque no necesitas consejos ajenos a no ser que tengas baja el autoestima. 
  • Aléjate de ellos, aprende que tú solo puedes y que la envidia no puede rondar cerca de ti.

          Cómo y por qué no ser una persona envidiosa: 

  • No pienses que por haber sentido envidia algunas veces durante tu vida eres envidioso; no. Porque más allá de ello, sin importar el sexo de la persona, a lo largo de la vida todos hemos sentido envidia por alguna persona; sea durante nuestra infancia como en nuestra adultez. 
  • No debes ser envidioso porque no es bueno para la salud. Piensa en ti, enfócate en tus logros, en tus metas de vida. Disfruta de ella porque es una sola y tú eres único con tu cuerpo y alma, más allá de los mitos que se dicen. 
  • Recuerda que nadie lo tiene todo, que todos nos esmeramos día a día para conseguir lo que queremos y que no es fácil poder triunfar siempre. 
  • Busca ayuda, tanto como familiar como profesional. Habla sobre la envidia que sientes por los demás, ¡¡porque con un poco de ayuda puedes superarla!!

REFLEXIÓN:

No seamos envidiosos, disfrutemos de las cosas que tenemos nosotros mismos y no envidiemos las que las demás personas tienen, porque al fin y al cabo no podemos pasar toda nuestra vida fijándonos en las cosas de los demás. ¡Vive tu vida! Y por más que muchas veces caigas, levántate y sigue disfrutando de ella, porque como esta vida que tienes, no tendrás otra. De eso quédate seguro/a. 
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